Dominicana convierte el vidrio en obras de arte
Conozca la historia de Sheila Hernández y sus famosas mariposas
En la fabricación de mariposas de vidrio para decorar la casa, una terraza o algún establecimiento comercial, Sheila Hernández se considera una de las más buscadas en la capital dominicana.
Comenzó a trabajar vitrales en el año 1990 junto a su hermana y el esposo de ésta, pero diez años después se independizó cuando ambos se fueron del país. “Como nombre le puse Vitrales by Sheila a mi empresa”, le dijo la emprendedora al equipo del periódico elCaribe que se interesó en conocerle.
Habla con orgullo de su trabajo y no se esfuerza en disimularlo. “He tenido buena aceptación en el mercado y voy camino a crecer más; es mi aspiración. Incluso, quiero llegar a exportar lo que hago”, sigue diciendo, sin detener labor.
“La materia prima que uso es el vidrio, un vidrio que no se fabrica aquí, sino que hay que importarlo de otras naciones. Estoy en capacidad de diseñar la pieza que el cliente me pida, siempre y cuando se pueda plasmar en un vitral”, dice mientras corta y pega partes.
Las mariposas son posiblemente las obras que el público más le demanda a Sheila, pero sus elaboraciones abarcan mucho más.
“Se pueden hacer vitrales en las puertas, las ventanas, lámparas y otros. Es precisamente lo que hago, pero también reparo obras de vidrio que se rompen”, expone. La historia completa aquí